El 4 de mayo de 2014 escribí un artículo llamado ¨El nombre lo indica¨ en el cual explicaba las razones históricas del actual conflicto ucraniano. En ese texto explicaba cómo el nombre de Ucrania significa en ucraniano “territorio fronterizo” o “país”, lo cual revela la esencia de la crisis de esta nación desde su separación de la Unión Soviética (URSS) en 1991.
Fragmentada entre una población de origen polaca y eslava de lengua ucraniana en el Oeste y una de mayoría rusa en su parte oriental, la actual Ucrania junto a territorios de lo que hoy son Bielorrusia y Rusia, en el siglo 9. D.C, tiene su origén en el territorio medieval de Rutenia, una extenza zona de tribus eslavas en la cual, justamente en zonas alrededor de la actual capital ucraniana Kiev, se formó una entidad política llamada La Rus de Kiev, liderada por el principe Oleg.
En otras palabras, la primera monaquía eslava de la historia es la de La Rus de Kiev y luego surgió el ducado de Moscú y no al revés, y eso es importante saberlo porque Putin altera la narrativa histórica diciendo que Ucrania «nación con Lenin cuando se creó la Unión Soviética en 1922».
En el siglo 13 el extenso imperio mongol conquistó y destruyó al imperio eslavo fragmentándolo en varios principados hasta que desde la ciudad de Moscú, en el siglo 14, un ejército logró expulsar a los mongoles conquistando, a Ucrania y a Bielorrusia, que dos siglos después pasaron a ser zonas del recién nacido Imperio Ruso de los zares.
En ese periodo y hasta el fin de la I Guerra Mundial, Ucrania, como su nombre lo indica, fue una tierra fronteriza a otras entidades: el Reino Polaco-Lituano, luego una serie de provincias repartidas por poderes regionales asiáticos, y en el siglo 19, otra vez, estuvo dividida entre el Imperio Ruso y el Austro-Húngaro (Crimea llegó a estar un tiempo en manos de los Turcos Otomanos).
En 1917 Ucrania se reunificó con regiones en las que se hablaba su idioma y en 1922 fue integrada a la URSS como una de sus repúblicas. En 1939 Alemania ocupó dos tercios de Polonia y la URSS el otro tercio, territorio que quedo bajo dominio ucraniano hasta la actualidad.
Así las cosas, Putin aprovecha la simpatía de la población rusA parlante oriental para anexar sus provincias y la OTAN no sabe qué hacer con un territorio sin identidad nacional definida y ante el ¨ajedrecista¨ audaz y peligroso como el dictador ruso.
FUENTE: INTO EUROPE
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